“Los gobiernos que se precian de democráticos, son los que respetan las leyes y los que jamás pierden el rumbo porque se dejan guiar por la brújula de lo que el pueblo quiere… Cuando el pueblo rechaza una decisión, el demócrata debe aceptar el mandato, de lo contrario sólo fue una falsedad de democracia y en realidad es un despótico tirano simulando amplitud de criterios y suficiente tolerancia…” (Tocquevile, “La democracia en América”, comentarios de la edición francesa).
El republicano acto de apertura por parte del Ejecutivo Provincial del Período de Sesiones Ordinarias de la Legislatura Provincial, no fue más que un acto político partidario de un sector, sin presencia de la representación política institucional de la minoría y con una mayoría amontonada, alineados a fuerza de temer la pérdida de beneficios y mirándose de reojo entre ellos, porque poco creen lo que el mandamás les dice, pero deben aparentar que están convencidos, activamente promoviendo los aspectos más urticantes de la política oficial.
En el estrado, el Nerón del Imperio Riojano, alucinaba con su modelo minero, como un muñequito de caricatura y totalmente desesperado, parloteaba las virtudes y bonanzas de la minería con cianuro, que no sólo no contamina, sino que además nos dará “dignidad” a la vida diaria. Seguramente que es otra dignidad y no la que ya nos robaron para enriquecerse, incrementar sus patrimonios, dilapidarla con amigotes y adulones. En su mensaje por momentos más parecido a una arenga enfurecida porque en la plaza el pueblo autoconvocado firmemente rechazaba sus propósitos, en cambio la ilusión óptica de sus adalides no lograba concretar el anhelo de una ceremonia institucional aplaudida a rabiar por el pueblo, no dejando ni una baldosa vacía del viejo edificio de la Escuela Normal, convertido luego de la cirugía arquitectónica en una hibridez parecida a las barbies fabricadas en los quirófanos con mujeres que se niegan a los años.
Los que “movilizaron” se preguntaban dónde estaban los centenares que habían trasladado con fondos emitidos desde la Secretaria de la Gobernación y cuyas caras no se mostraban en la ceremonia oficial. Ni por cerca de lo que se esperaba en las esferas del Gobierno y Nerón obnubilado en su rol, no podía disimular la furia.
El escenario lo desorientó, lo dejó patas para arriba, viendo al revés todo. Desde esa perspectiva habló de que la principal política del estado será la educación, pero en realidad debería haber dicho manipulación, porque una cosa es educar y otra manipular. Porque se hayan comprado las XO, o se estén construyendo escuelas con fondos de la Nación no quiere decir que la maestra esté bien, ni mucho menos el alumno. Si la XO que enorgullecen al Gobernador, son un instrumento de aprendizaje, una herramienta de estudio, un canal para la búsqueda de información y fortalecimiento de la libertad de criterio. Y viéndolo así, estaría todo bien. Pero resulta que hay temas que no se pueden hablar, ni debatir en las aulas, ni investigar en las Ferias de Ciencias Escolares, que los manuales deben ser revisados (aun los oficiales) los niveles de educación no serán buenos sino lo que será bueno es la manipulación. El Gobierno sabe que en los sectores juveniles está el fuerte de la defensa del medio ambiente, entonces presionan hasta con las viandas estudiantiles.
En materia de salud se fanfarronea con la inversión en infraestructura pero los profesionales de la salud no cuentan con insumos, o el elefante blanco que es el Hospital de la Madre y el Niño en la Capital, tiene el convenio con la Nación al borde de caducar, pero aun no funciona porque la Provincia no cuenta con fondos para el funcionamiento. Esa famosa postura de construir sin saber para qué, total lo que importa es lo que la construcción deja en los bolsillos de los que “construyen”.
No dejó de lado en su mensaje a las SAPEM. Esas empresas donde si quiebran se pierden los fondos públicos y si dan ganancias esas utilidades seguramente tendrán dueños determinados en vez de ser de todos. Y la nave insignia es Agroandina con sus desechos industriales sin tratamiento y los números ocultos aunque sea de todos y de nadie.
Y en los catálogos de SAPEM hay de todo: de tomates, de cerdos, de pollos, de adoquines, aceituneras, de alfa, de energía, de agua, de internet y obvio de minería. Empresas multirubros con fondos de todos pero manejadas por amigotes de Nerón. Sería más republicano que los niveles gerenciales de esas empresas prácticamente del estado, se concursen y se designen por aptitud y no por obediencias.
Claro el plato fuerte del banquete fue el oro y la plata del Famatina. El confundido quiere confundir y levanta las banderas del ambientalismo y quiere comparar la contaminación del cianuro sideral de la minería con el cromo de la curtiembre de Nonogasta, como si uno no fuera tan peligroso como el otro, pero el minero, potenciado a la enésima potencia. El caso testigo de Nonogasta no es para menospreciar la contaminación de la minería, ni tampoco para mirar para otro lado. Los responsables de la contaminación de Nonogasta, nefasta y atroz pero ínfima a la par de lo que sería lo del Proyecto Famatina son los mismos. ¿O acaso Beder no estaba en el poder cuando los Yoma iniciaron la expansión de su curtiembre familiar y el olor nauseabundo nos decía que algo estaba mal? ¿O Beder no es aun hoy gobernador cuando nacen niños enfermos, aumentan las enfermedades respiratorias? ¿Qué hacen hoy con los derrames de líquidos de Agroandina? Entonces qué garantías hay que lo harán con el Famatina, que tendrá mil veces más potencialidad contaminante.
Pero la caradurez llegó al extremo, cuando invitó al debate. Ellos manejan el aparato propagandístico del estado, instauran la censura, controlan la mayoría de los medios con las pautas publicitarias que enmudecen, porque la necesidad tiene cara de hereje, y hasta sumarian a los docentes que se atreven a expresarse libremente ¿O Ud. Vio en el canal del 9 del estado algún vecino de Chilecito o de Famatina hablando a favor del reclamo popular? Sin embargo en el canal de todos con una repetición increíble irrumpe en las pantallas un tal Capelo, foráneo y bien pagado para decir lo que Neron quiere que se diga, aunque cuando llega al tema del cianuro no le da la cara para decir que es inocuo y sólo habla vagamente que no está probado el poder contaminante.
Así las cosas, una semana más pasó y el trauma en el gobernador es cada vez más evidente. La manipulación se termina y el pueblo será el encargado de darle el final.
En el estrado, el Nerón del Imperio Riojano, alucinaba con su modelo minero, como un muñequito de caricatura y totalmente desesperado, parloteaba las virtudes y bonanzas de la minería con cianuro, que no sólo no contamina, sino que además nos dará “dignidad” a la vida diaria. Seguramente que es otra dignidad y no la que ya nos robaron para enriquecerse, incrementar sus patrimonios, dilapidarla con amigotes y adulones. En su mensaje por momentos más parecido a una arenga enfurecida porque en la plaza el pueblo autoconvocado firmemente rechazaba sus propósitos, en cambio la ilusión óptica de sus adalides no lograba concretar el anhelo de una ceremonia institucional aplaudida a rabiar por el pueblo, no dejando ni una baldosa vacía del viejo edificio de la Escuela Normal, convertido luego de la cirugía arquitectónica en una hibridez parecida a las barbies fabricadas en los quirófanos con mujeres que se niegan a los años.
Los que “movilizaron” se preguntaban dónde estaban los centenares que habían trasladado con fondos emitidos desde la Secretaria de la Gobernación y cuyas caras no se mostraban en la ceremonia oficial. Ni por cerca de lo que se esperaba en las esferas del Gobierno y Nerón obnubilado en su rol, no podía disimular la furia.
El escenario lo desorientó, lo dejó patas para arriba, viendo al revés todo. Desde esa perspectiva habló de que la principal política del estado será la educación, pero en realidad debería haber dicho manipulación, porque una cosa es educar y otra manipular. Porque se hayan comprado las XO, o se estén construyendo escuelas con fondos de la Nación no quiere decir que la maestra esté bien, ni mucho menos el alumno. Si la XO que enorgullecen al Gobernador, son un instrumento de aprendizaje, una herramienta de estudio, un canal para la búsqueda de información y fortalecimiento de la libertad de criterio. Y viéndolo así, estaría todo bien. Pero resulta que hay temas que no se pueden hablar, ni debatir en las aulas, ni investigar en las Ferias de Ciencias Escolares, que los manuales deben ser revisados (aun los oficiales) los niveles de educación no serán buenos sino lo que será bueno es la manipulación. El Gobierno sabe que en los sectores juveniles está el fuerte de la defensa del medio ambiente, entonces presionan hasta con las viandas estudiantiles.
En materia de salud se fanfarronea con la inversión en infraestructura pero los profesionales de la salud no cuentan con insumos, o el elefante blanco que es el Hospital de la Madre y el Niño en la Capital, tiene el convenio con la Nación al borde de caducar, pero aun no funciona porque la Provincia no cuenta con fondos para el funcionamiento. Esa famosa postura de construir sin saber para qué, total lo que importa es lo que la construcción deja en los bolsillos de los que “construyen”.
No dejó de lado en su mensaje a las SAPEM. Esas empresas donde si quiebran se pierden los fondos públicos y si dan ganancias esas utilidades seguramente tendrán dueños determinados en vez de ser de todos. Y la nave insignia es Agroandina con sus desechos industriales sin tratamiento y los números ocultos aunque sea de todos y de nadie.
Y en los catálogos de SAPEM hay de todo: de tomates, de cerdos, de pollos, de adoquines, aceituneras, de alfa, de energía, de agua, de internet y obvio de minería. Empresas multirubros con fondos de todos pero manejadas por amigotes de Nerón. Sería más republicano que los niveles gerenciales de esas empresas prácticamente del estado, se concursen y se designen por aptitud y no por obediencias.
Claro el plato fuerte del banquete fue el oro y la plata del Famatina. El confundido quiere confundir y levanta las banderas del ambientalismo y quiere comparar la contaminación del cianuro sideral de la minería con el cromo de la curtiembre de Nonogasta, como si uno no fuera tan peligroso como el otro, pero el minero, potenciado a la enésima potencia. El caso testigo de Nonogasta no es para menospreciar la contaminación de la minería, ni tampoco para mirar para otro lado. Los responsables de la contaminación de Nonogasta, nefasta y atroz pero ínfima a la par de lo que sería lo del Proyecto Famatina son los mismos. ¿O acaso Beder no estaba en el poder cuando los Yoma iniciaron la expansión de su curtiembre familiar y el olor nauseabundo nos decía que algo estaba mal? ¿O Beder no es aun hoy gobernador cuando nacen niños enfermos, aumentan las enfermedades respiratorias? ¿Qué hacen hoy con los derrames de líquidos de Agroandina? Entonces qué garantías hay que lo harán con el Famatina, que tendrá mil veces más potencialidad contaminante.
Pero la caradurez llegó al extremo, cuando invitó al debate. Ellos manejan el aparato propagandístico del estado, instauran la censura, controlan la mayoría de los medios con las pautas publicitarias que enmudecen, porque la necesidad tiene cara de hereje, y hasta sumarian a los docentes que se atreven a expresarse libremente ¿O Ud. Vio en el canal del 9 del estado algún vecino de Chilecito o de Famatina hablando a favor del reclamo popular? Sin embargo en el canal de todos con una repetición increíble irrumpe en las pantallas un tal Capelo, foráneo y bien pagado para decir lo que Neron quiere que se diga, aunque cuando llega al tema del cianuro no le da la cara para decir que es inocuo y sólo habla vagamente que no está probado el poder contaminante.
Así las cosas, una semana más pasó y el trauma en el gobernador es cada vez más evidente. La manipulación se termina y el pueblo será el encargado de darle el final.
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